Sergio y Richard. 23 de noviembre de 2008. Playa de Oriñón, Cantabria.
Esta vez, para evitarnos que por la mala mar no podamos volver al coche por el agua, decidimos aparcar en la playa de Oriñón directamente, que aunque hay que andar bastante hasta llegar al agua, estamos más tranquilos a la vuelta.
El día era algo frío y de vez en cuando caían unas buenas chaparradas. Además estábamos solos en el agua, porque las olas venían muy irregulares y para los surfistas no estaba fácil.
A pesar de todo, nosotros nos dimos un baño genial, y esta vez con la cámara de Sergio bien colocada en su sitio, enfocando donde tenía que hacerlo, así que los vídeos han salido lo bien que se podía esperar.
No hemos podido coger los mejores momentos, porque era difícil que coincidiera que uno hiciera una buena ola y el otro estuviera grabando, pero lo que ha salido, ha salido bien.
En esta grabación se aprecia como Sergio coge la ola, y más adelante yo. 360º desde la visión de mi hermano, como si el que está viendo el vídeo los pudiera experimentar en sus propias carnes.
Esta vez, para evitarnos que por la mala mar no podamos volver al coche por el agua, decidimos aparcar en la playa de Oriñón directamente, que aunque hay que andar bastante hasta llegar al agua, estamos más tranquilos a la vuelta.
El día era algo frío y de vez en cuando caían unas buenas chaparradas. Además estábamos solos en el agua, porque las olas venían muy irregulares y para los surfistas no estaba fácil.
A pesar de todo, nosotros nos dimos un baño genial, y esta vez con la cámara de Sergio bien colocada en su sitio, enfocando donde tenía que hacerlo, así que los vídeos han salido lo bien que se podía esperar.
No hemos podido coger los mejores momentos, porque era difícil que coincidiera que uno hiciera una buena ola y el otro estuviera grabando, pero lo que ha salido, ha salido bien.
En esta grabación se aprecia como Sergio coge la ola, y más adelante yo. 360º desde la visión de mi hermano, como si el que está viendo el vídeo los pudiera experimentar en sus propias carnes.
Ahora cogemos los dos la misma ola a escasos metros de distancia el uno con el otro. Están cogidas perfectamente las maniobras tanto de uno como del otro. Lo malo ha sido que los dos hacemos los giros hacia el mismo lado, con lo que acabamos juntos, y yo para no chocar, giro brusco y vuelco. Pero aún así el vídeo está genial.
Podíamos poner más vídeos, pero son un poco más de lo mismo.
Creo que con estos dos para describir como lo pasamos esté día, está bien.
A ver si el siguiente no se me olvida la cámara a mi y podemos completar con alguna buena foto y más ahora que en invierno sube el mar, las olas tienen más fuerza, y todo queda mucho más vistoso.
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